Cadena perpetua a cuatro acusados por la muerte de 71 personas refugiadas en 2015 en un camión frigorífico
Budapest (EuroEFE).- Un tribunal húngaro condenó este jueves, en segunda y definitiva instancia, a cadena perpetua a los cuatro cabecillas de la red de traficantes de personas responsabilizada de la muerte de 71 refugiados, hallados asfixiados en un camión frigorífico abandonado en Austria en 2015.
59 hombres, 8 mujeres y 4 menores
Según la agencia magiar MTI, el Tribunal de Szeged, en el sur de Hungría, dictaminó además penas de al menos cuatro años de cárcel para otros diez acusados por este crimen.
El fallo de segunda instancia, que ya no puede ser recurrido, es más severo que la primera sentencia de 25 años de prisión para cada uno de los cabecillas, acusados del delito de homicidio con especial crueldad y por trata de personas con el agravante de pertenencia a una organización criminal.
A tres de los condenados a cadena perpetua se les ha negado la posibilidad de libertad condicional.
La red de traficantes de personas estaba formada por doce búlgaros y dos afganos, supuestamente vinculados a redes de Grecia y Turquía.
El proceso judicial tuvo lugar en Hungría porque las investigaciones aclararon que los refugiados, que viajaban en un camión hacia Europa occidental, murieron cuando estaban aún en territorio húngaro.
Según el tribunal, los 59 hombres, 8 mujeres y 4 menores fueron trasladados desde la localidad de Mórahalom, cerca de la frontera con Serbia, encerrados en la parte de carga del camión.
Se estima que los refugiados murieron en territorio húngaro, pocas horas después de salir, asfixiados por la falta de oxígeno.
Los refugiados trataron de alertar varias veces al conductor y a los cabecillas de las malas condiciones en el interior del camión, pero según la Fiscalía húngara, éstos no se ocuparon de ello.
Finalmente el vehículo con los muertos en su interior fue abandonado en el arcén de una autopista cerca de Parndorf, en el estado federado austríaco de Burgenland.
Por Marcelo Nagy
59 hombres, 8 mujeres y 4 menores Según la agencia magiar MTI, el Tribunal de Szeged, en el sur de Hungría, dictaminó además penas de al menos cuatro años de cárcel para otros diez acusados por este crimen.
El fallo de segunda instancia, que ya no puede ser recurrido, es más severo que la primera sentencia de 25 años de prisión para cada uno de los cabecillas, acusados del delito de homicidio con especial crueldad y por trata de personas con el agravante de pertenencia a una organización criminal.
A tres de los condenados a cadena perpetua se les ha negado la posibilidad de libertad condicional.
La red de traficantes de personas estaba formada por doce búlgaros y dos afganos, supuestamente vinculados a redes de Grecia y Turquía.
El proceso judicial tuvo lugar en Hungría porque las investigaciones aclararon que los refugiados, que viajaban en un camión hacia Europa occidental, murieron cuando estaban aún en territorio húngaro.
Según el tribunal, los 59 hombres, 8 mujeres y 4 menores fueron trasladados desde la localidad de Mórahalom, cerca de la frontera con Serbia, encerrados en la parte de carga del camión.
Se estima que los refugiados murieron en territorio húngaro, pocas horas después de salir, asfixiados por la falta de oxígeno.
Los refugiados trataron de alertar varias veces al conductor y a los cabecillas de las malas condiciones en el interior del camión, pero según la Fiscalía húngara, éstos no se ocuparon de ello.
Finalmente el vehículo con los muertos en su interior fue abandonado en el arcén de una autopista cerca de Parndorf, en el estado federado austríaco de Burgenland.
Por Marcelo Nagy
