El banco malo, creado para rescatar las carteras inmobiliarias de la banca en la crisis anterior, rechazó la petición de una prórroga. Muchos de los ocupantes son supervivientes de la nave incendiada hace un año en Badalona. En estos meses ni Ayuntamiento ni Generalitat les han ofrecido una alternativa habitacional.
En la mañana de esta jueves Badalona ha vivido un megadesahucio contra cerca de 100 ocupantes de una nave industrial que habían habilitado como vivienda. Hasta 16 dispositivos de la Brimo y 10 coches patrulla de los Mossos d’Esquadra tomaban las inmediaciones del inmueble situado en la calle Progrés a primera hora de la mañana.
A las 11:45 comenzaba una brutal intervención en la que se ha desalojado por la fuerza a las 80 personas que se habían negado a abandonar el que hasta hoy era su hogar. Un edificio que era propiedad de la Saber, el “banco malo” de titularidad pública y con el que el Estado rescató las carteras inmobiliarias de los bancos en la crisis de 2008.
Los ocupantes, miembros de la comunidad subsahariana de la ciudad, habían solicitado una prórroga de 3 meses para encontrar una alternativa habitacional, que fue rechazada por la Sareb apremiando al desalojo. La abogada que los representa había solicitado al Tribunal Europeo de Derechos Humanos tres medidas cautelares “para evitar que más de 100 personas se queden en la calle sin alternativa habitacional” .
Muchos de quienes allí vivían eran parte de los supervivientes de la finca que se incendió hace poco más de un año, en diciembre de 2020, en la que fallecieron cuatro personas. Desde entonces ni el Ayuntamiento ni la Generalitat ha ofrecido una solución habitacional para ninguna de ellas.
Después de desalojados los Mossos han continuado realizando cargas policiales a los grupos que seguían por la zona y otros vecinos y vecinas que se estaban solidarizando. Entre ellas se encontraba la diputada de la CUP y exalcaldesa de Badalona, Dolors Sabaté que ha denunciado que los “Mossos toman partido por el opresor”.
El exalcalde de Badalona, el popular Xavier García Albiol, se ha desplazado al lugar de los hechos a provocar a los recién desahuciados habitantes del inmueble. En actitud desafiante y haciendo gala de un racismo que es parte integral de su marca ha sido increpado por ellos y, obviamente, bien protegido y escoltado por el desorbitado dispositivo policial.
La policía autonómica catalana sigue actuando como el brazo fuerte de los grandes propietarios de vivienda, en este caso una entidad pública heredera del rescate a la banca que dejó un agujero en las cuentas públicas de 60 mil millones de euros. La palabrería del govern de Pere Aragonés y las falsas promesas, incluidas las que se recogieron en el acuerdo de investidura con la CUP, de que se dejaría de enviar antidisturbios a los desahucios quedan todos los días en evidencia en actuaciones como estas.
El crimen social que se vive cotidianamente en localidades como Badalona tiene responsables claros, que pasan desde el Ayuntamiento de la localidad, hoy nuevamente en manos del PSC, la Generalitat que sigue usando a los Mossos como guardia pretoriana de los grandes tenedores y el gobierno central que, aunque se diga “progresista”, en materia migratoria no ha cambiado ni una coma de las políticas imperialistas y racistas de extranjería que condenan a personas como los habitantes del bloque desalojado al trabajo irregular, infraviviendas y la amenaza constante de ser deportado.
