La solidez de la economía nacional y la debilitación del dólar son los factores que fortalecen a nuestro perso
OPINIÓN de Teodoro Rentería Arróyave
Nuestra solidaridad con el amigo, Ricardo Monreal Ávila, en el deseo sincero de que a la brevedad sean rescatados, sanos y salvos, su primo, Pedro Ávila Rodríguez y dos personas más, hechos ocurridos en su natal Zacatecas.
Los medios internacionales, en un auto ejercicio, se preguntan: ¿Qué hay detrás de la fortaleza del peso mexicano? Al respecto así se contestan: Un debilitado dólar estadounidense y la solidez de los fundamentos de la economía nacional mexicana, aparejada a las atractivas tasas de interés domésticas.
Esos factores, añaden, fortalecen a la divisa azteca, recuérdese que esta semana el tipo de cambio en México rompió el nivel de los 17,50 pesos por dólar. Llegó a cotizarse hasta en 17,40 en algún momento del lunes 15 de mayo. Este nivel de la paridad cambiaria no se observaba por lo menos desde 2016 y contrasta con el nivel de 19,44 con el que empezó el año y con su punto más alto en los últimos 12 meses, que llegó a ser de 21,04.
La plataforma de “Periodistas en Español”, donde colaboramos, nos explica a profundidad de este comportamiento en un análisis que titula: “El euro, la Unidad Monetaria Asiática y el Renminbi amenazan la supremacía del dólar”.
Así lo explica: Hace medio siglo, el dominio del dólar estadounidense en el sistema financiero y comercial internacional era indiscutible. En 1977, el dólar alcanzó un pico de 85 por ciento como moneda predominante en las reservas de divisas; en 2001, esta posición aún rondaba el 73 por ciento. En la actualidad, se sitúa en torno a 58 por ciento.
Asómbrense respetados lectores, radioyentes, televidentes y cibernautas, el dominio del dólar y la posición hegemónica de Estados Unidos han estado entrelazados durante mucho tiempo, pero es el caso que las recientes transformaciones globales están afectando la capacidad de Estados Unidos para mantenerla.
Agrega, el movimiento gradual del centro de gravedad de Occidente a Oriente, las complejidades de la política interna de Estados Unidos, el creciente músculo de la proyección internacional de China y la asertividad internacional de los países del Sur Global han frenado la supremacía y el estatus del dólar estadounidense.
Sin embargo, aceptan que esta moneda sigue siendo, con diferencia, la más importante en el comercio mundial, en las transacciones de divisas, en los pagos SWIFT, por sus siglas en inglés: Sociedad de Telecomunicaciones Financieras Interbancarias Mundiales, y en la deuda emitida fuera de Estados Unidos.
De hecho, agentes financieros occidentales, funcionarios gubernamentales y expertos de renombre tienden a restar importancia a la llamada desdolarización, argumentando que un dólar relativamente debilitado no significa necesariamente su desaparición. Desde luego, nadie ha dicho que el dólar esté a punto de caducar, pero sí de su quebranto.
A pesar de las controvertidas opiniones, es innegable que el sistema mundial se enfrenta a retos más complejos, diversos y plurales que implican la competencia de divisas y nuevas vías financieras innovadoras.
LA SOLIDEZ DE LA ECONOMÍA NACIONAL Y LA DEBILITACIÓN DEL DÓLAR, SON LOS FACTORES QUE EXPLICAN LA FORTALEZA DE NUESTRO PESO.
