OPINIÓN de Julio Ortega Bienvenidos al "Pim, pam, pum" nacional. Pasen, carguen, apunten y maten señoras y señores. Tenemos vidas a precio de saldo. Ustedes ponen las armas y la administración les otorga el beneplácito para apretar el gatillo. De proporcionar las víctimas se encarga la naturaleza, un entorno que hemos transformado a golpe de ley en caseta de feria y donde los premios son peluches de piel, carne y hueso. Disparen a mansalva y sin miedo que los animales están para eso: negocio y diversión humanas. En su caso, tratándose de un puro entretenimiento, nos ocuparemos de cubrir el rojo de la sangre que derraman esos monigotes al ser alcanzados, con el verde implícito en términos como conservacionismo, ecologísmo o sostenibilidad, tan de moda y tán rentables hoy en día, que ya se sabe que es más útil parecer honrado que serlo... La Junta de Castilla y León autoriza la caza de corzas durante la época en la que están preñadas o amamantando a sus corcinos. Por sup