King’s Road es la calle más importante de Chelsea y de Fulham, dos barrios exclusivos del oeste londinense. Es una zona elegante, con tiendas de alta moda frecuentadas por la nobleza y por las estrellas del mundo del espectáculo. Ahí, en el 430, está la boutique que fuera propiedad de Malcolm McLaren, músico y empresario, manager de los Sex Pistols. Ese local, que aún pertenece a su viuda Vivienne Westwood, era frecuentado por el trío The Strand: Steve Jones en voz, Paul Cook en batería y Wally Nightingale en guitarra. La boutique se llamaba Too fast to live, too young to die y vendía ropa fetichista, casi sadomasoquista. Poco a poco se fue transformando en un exitoso local de ropa más rockera, el prototipo del punk. Llegó el año 1975, con varios cambios. La tienda se rebautizó como SEX y el trío The Strand modificó totalmente su formación. McLaren, ya como manager de la banda, impuso a Glen Matlock como bajista. Lo curioso es que Matlock era empleado de la boutique, como tambié